Dios, Colón y la representación colonial de América
Kintto Lucas. Prensa-latina, 25 de marzo de 2018.
El Diario de a bordo podría ser asumido como la simple crónica de un descubrimiento, y lo es, pero representa mucho más: establece las bases para la construcción de un imaginario colonial que logró imponerse y todavía padecemos.
La crónica de Colón parte de la tesis preconcebida del descubrimiento y apunta primero hacia la construcción de un imaginario del descubrimiento, y luego hacia la consolidación de ese imaginario. El descubrimiento es parte de la representación colonial de la llegada de Colón a América. Era necesario imponer la imagen y el significado del descubrimiento como una obra de España y de Dios, y se logró por cientos de años.
Como contrapartida de esta idea, que logró hegemonizar el pensamiento y las ideas durante siglos, se construye una representación anticolonial de resistencia a la conquista, que buscó crear un pensamiento contrahegemónico del descubrimiento, posicionando en parte del imaginario colectivo, sobre todo en América Latina, la idea de una conquista a pueblos que habitaban en el continente, provocando la muerte de millones de personas y la resistencia a esa conquista.