Mientras los grandes medios de comunicación al servicio de la reacción internacional tratan de ocultar o minimizar el cobarde atentado realizado el 4 de agosto en Caracas, contra el presidente constitucional Nicolás Maduro Moros y la Dirección revolucionaria de ese hermano país, el pasado día 6 el pueblo venezolano se volcó indignado a las calles para condenar enérgicamente la infame tentativa de magnicidio perpetrada con la detonación de dos drones cargados de explosivos.
El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Néstor Reverol, presentó un breve balance sobre los alcances en la investigación y señaló que para el ataque se utilizaron drones modelo DJI M600, dirigidos a la figura del presidente Maduro y demás autoridades civiles y militares que le acompañaban durante el acto de aniversario de la Guardia Nacional Bolivariana, realizado en la avenida Bolívar de la capital venezolana.Sigue