Crónica del acto organizado por el Foro contra la guerra imperialista y la OTAN sobre la Campaña por la liberación de los prisioneros palestinos:

“Hay que encontrar los espacios desde los que nutrir la esperanza”

El lunes 19 de septiembre en la librería Enclave de Madrid nos dimos cita con dos luchadores por la liberación de Palestina. Ella es Charlotte Kates, abogada y activista canadiense de la organización Samidoun Palestinian Prisioners Solidarity Network (http://samidoun.net/2016/09/solidarity-strike-begins-in-support-of-balboul-brothers-al-qadi-inside-israeli-prisons-as-health-condition-worsens/) y Khaled Barat es dirigente del FPLP, escritor y activista de DDHH.

Charlotte nos habló de los prisioneros palestinos en las cárceles israelíes y en las de los gobiernos cómplices como el de Francia donde se encuentra Georges Ibrahim Abdallah, el prisionero político más antiguo de Europa, que lleva encarcelado en Francia desde hace 30 años. Charlotte siempre utiliza el término de prisioneros no el de presos precisamente para destacar que se trata de una guerra colonial contra el pueblo palestino y que Israel es un Estado de ocupación. De ahí que en Israel haya más de 7.000 prisioneros palestinos, 750 de ellos en detención irregular, es decir, administrativa, sin que se hayan presentado cargos contra ellos ni hayan tenido un juicio. Además, todos los años se celebran más de 700 procesos militares contra los prisioneros y hay 400 niños encarcelados en Israel.

Israel viola sistemáticamente los derechos de los prisioneros palestinos, nos dijo Charlotte, detiene a los líderes para separarles de las comunidades y romper sus vínculos. En estos momentos hay tres presos en huelga de hambre, no sólo para denunciar su situación sino para terminar con la forma de detención administrativa. Ellos están poniendo sus cuerpos y su vida toda en la causa palestina. Frente a la imagen que se transmite desde los medios masivos de división de los palestinos, lo cierto es que la causa de los prisioneros es una causa de unidad. En las cárceles no importa a qué partido u organización se pertenezca, los prisioneros palestinos son la imagen de la resistencia.

Finalmente, la abogada canadiense, nos habló de la importancia del movimiento BDS (Boicot, Desinversiones y Sanciones) ya que no se dirige sólo a un aspecto de la ocupación sino al conjunto de las acciones que pone en marcha Israel para acabar con el pueblo palestino. Cuando el BDS denuncia y promueve el Boicot a empresas que se lucran con el sufrimiento palestino se están dando pasos para la liberación de los presos.

Su compañero Khaled Barat nos dijo que la lucha contra la ocupación empezó con el protectorado Británico y que hoy en día el bloque de países que sostiene y permite la ocupación es el mismo que la hizo posible en origen. Para Khaled, la historia de los prisioneros palestinos es también la historia de la resistencia, la historia de la literatura, de la poesía, de la música. Todas las expresiones artísticas y culturales de los palestinos están atravesadas por la ocupación.

La lucha del pueblo palestino es compleja y larga, queda mucho por recorrer y por eso, nos dice Khaled, hay que ser optimista “Si no lo somos seremos derrotados, necesitamos encontrar espacios desde los que obtener esa esperanza”. No se trata de ser superhéroes ni de ser cobardes, se trata de querer ser normales.

Para Khaled, conocer la historia y hacer análisis rigurosos es algo fundamental. Los países que son cómplices de Israel han tenido un pasado colonial y eso hace que apoyen el proyecto sionista de Israel.

Otro aspecto importante es que la lucha palestina siempre fue liderada por organizaciones secularizadas. Durante los años sesenta estaba en marcha una revolución palestina liderada por fuerzas laicas y era un referente para todas las luchas de liberación que tenían lugar en otras partes del mundo. Sólo a partir de los acuerdos de Oslo (1993) la lucha se traslada al campo religioso. Realmente ninguno de los gobiernos que promovían los acuerdos querían un estado palestino laico. Las negociaciones son una trampa que no lleva a ninguna parte, sólo a la división de los palestinos.

Khaled señaló que los palestinos tienen un problema de representación, no hay nadie que represente a todos los palestinos en su totalidad. Hamas representa a los palestinos de Gaza, Abbas dice representar a los palestinos del resto de los territorios pero no tiene legitimidad (no ha habido elecciones hace 7 años), a los palestinos del exterior nadie. Fatah y Hamas representan al ala derecha de los palestinos pero, nos dice Khaled, es como un pájaro con dos alas derechas: no vuela. Reconoce que la izquierda palestina ha fallado en hacer visible la lucha y nos dice que hay que poner el acento en las mujeres y en los jóvenes. Que no hay una solución al conflicto con dos estados, esa sería una opción de apartheid. El único camino para Khaled y para su partido (el FPLP) es un solo estado democrático.

Ángeles Diez (20/09/2016)