Aun sin ninguna prueba de algún tipo de enriquecimento personal, sin ninguna evidencia de haberse valido de ventajas personales en su cargo de presidente de Brasil, aun volviendo a vivir en el mismo departamento en la periferia obrera de São Paulo, desde donde salió para ser el presidente de más éxito y prestigio en Brasil –aun con todo ello–, Lula tiene que ser acusado, procesado, considerado culpable y condenado.
Emir Sader 17/09/2016
cubadebate.cu